La estética de lo grotesco en dos novelas de Liliana Blum
- Miguel Núñez May
- 18 nov 2017
- 2 Min. de lectura
La corporeidad diferente vista desde “Pandora” y “El monstruo pentápodo” Las dos novelas más recientes de la autora mexicana Liliana Blum (Durango, 1974) se manifiestan como un discurso que enfrenta estereotipos que causan exclusión y ponen de manifiesto la superficialidad de la sociedad que los alimenta. En la lectura hecha, se encuentran ciertos aspectos en los que se observan la presencia de discursos que perturban y “escandalizan” la norma presente en la sociedad. Primeramente, nos acercamos a los discursos del cuerpo gordo que rompe el esquema del cuerpo etéreo y aceptado dentro de lo bello en la novela Pandora (Tusquets, 2015). También observamos cómo Blum introduce personajes que no se contemplan en un canon de belleza de los últimos tiempos y que pretende transgredir a través del personaje Aimeé, en El monstruo pentápodo (Tusquets, 2017), novela en la cual la autora pretende mostrarnos sin ningún tipo de eufemismo moralino ni temeroso una realidad tristemente frecuente en la sociedad: el abuso de menores. En los textos consultados, se nos muestra con crudeza y ferocidad lo que muchas veces se toma como lo indeseable, aspectos de la vida y la sociedad con los que se convive día a día pero que se prefiere no ver, no escuchar; o bien, situaciones que se “aceptan” como algo ajeno a la sociedad misma que los relega. Así es como en sus páginas vemos personajes que son objeto de rechazo o mirados con lástima, a los que no les queda otra alternativa que conformarse con lo que poseen; van constituyendo al mismo tiempo sus propios discursos -que van fortaleciéndose- y que terminan usando como medios en los cuales se encuentran “seguros”. Se observa el uso de “máscaras” para ser aceptados en un aparente régimen de perfección estética y social, en donde lo “permitido” y valorado es sinónimo de rechazarse a sí mismo y mostrar una cara que siga ciegamente los lineamientos de lo aceptado, de lo “normal”. Leer más aquí..
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